¿Qué es una dieta hepatoprotectora?

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Visage/Stockbyte/Getty Images

El hígado es uno de los órganos más importantes del cuerpo humano. Lleva a cabo funciones vitales, incluyendo metabolismo, producción de enzimas, conversión de nutrientes a energía y desintoxicación. Incluso tiene la habilidad de autoregenerarse si parte de él se daña. Un hígado saludable es esencial para el bienestar de todo el organismo. Por ello, es importantísimo cuidarlo llevando un estilo de vida saludable y prácticas de dieta.

Función del hígado

El hígado es el órgano más grande del cuerpo, tiene el tamaño de una pelota de fútbol, dice la Fundación Internacional de Hepatitis. Su función primaria es filtrar la sangre y eliminar sustancias extrañas que son absorbidas a través de la piel, junto a los alimentos o al respirar. Desintoxica el cuerpo eliminando estas toxinas. Es responsable de convertir alimentos en energía, regular hormonas y producir inmunoglobulinas. El hígado controla la producción y excreción de colesterol y ayuda a resistir infecciones eliminando bacterias del torrente sanguíneo.

Alimentos que protegen al hígado

El Diet Channel enfatiza la importancia de una dieta saludable para mantener una adecuada función hepática. Una dieta saludable es aquella que incluye una variedad de comidas ricas en nutrientes de cada grupo de alimentos. Ayuda a proteger al hígado de sufrir daños y promueve un funcionamiento adecuado. Una buena dieta también tiene altos contenidos de fibra. Las fibras se unen al colesterol en el hígado y a la bilis en el intestino, transportando las toxinas fuera del cuerpo. En consecuencia, una dieta con mucha fibra ayuda al hígado en sus funciones desintoxicantes.

Importancia de los antioxidantes

Según el sitio web Liver Transplant India, los antioxidantes protegen contra los radicales libres, o subproductos del metabolismo humano. Los betacarotenos, presentes en los camotes, zanahorias, damascos, calabazas y mangos, ayudan al hígado a desintoxicar. Un antioxidante potente, el licopeno, presente en tomates, guayabas, sandías y papayas, suprime a los radicales libres que causan cáncer. El selenio, presente en arroz y trigo, y la vitamina E, abundante en almendras, aceites y brócoli, protegen al hígado de las toxinas dañinas. La vitamina A, que se encuentra en limones, naranjas, cereales, pollo y pescado, promueve la desintoxicación.

Otros nutrientes esenciales

El sitio Women Fitness discute la importancia de consumir alimentos que contengan ácido fólico, magnesio, hierro, vitaminas B, metionina, cisteína y colina. La intoxicación del cuerpo puede ser un síntoma secundario de una deficiencia en estos nutrientes, necesarios para que el hígado cumpla su función desintoxicante. Una dieta que incluya frijoles, frutas y vegetales frescos, aceites saludables, nueces, semillas y yogur asegurará una ingesta adecuada de estos nutrientes. Adicionalmente, los carbohidratos complejos, como el arroz integral y los frijoles, y las proteínas magras, como las lentejas, huevos, pollo y pescado, le brindan al cuerpo vitaminas y minerales esenciales para proteger al hígado.

Qué evitar

Según lo informa la Fundación Internacional de Hepatitis, el hígado funciona como un filtro para el alcohol, y en consecuencia puede dañarse si se consumen excesivas cantidades de esta sustancia. El consumo de alcohol puede agotar al hígado, causando daño permanente o fibrosis. Los contaminantes ambientales, incluyendo los gases de las pinturas, los insecticidas u otros productos en aerosol, también deben evitarse. Estos son tomados por las células sanguíneas en los pulmones y llevados al hígado, donde son detoxificados y liberados en la bilis. Estos químicos pueden abrumar al hígado, causando daño irreversible.