¿Qué causa rollos de grasa debajo del ombligo?

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Jupiterimages/Comstock/Getty Images

Algunas personas son más propensas que otras a ganar grasa en la parte inferior del vientre. Las mujeres son más propensas que los hombres, en especial después de la menopausia, y aquellas con cuerpos con forma de manzana, a diferencia de los cuerpos con forma de pera, a menudo corren el riesgo de aumentar de peso en el estómago. Pero existen ciertas medidas que puedes tomar para reducir la grasa en el vientre.

Grasa visceral

La Universidad de Harvard informa que la grasa en el abdomen es a menudo grasa visceral, mientras que la grasa que ganas en tu trasero y muslos es grasa subcutánea, o simplemente debajo de la superficie. La grasa visceral, que rodea tus órganos, es más peligrosa y puede causar condiciones médicas difíciles, como enfermedades cardíacas, alto colesterol y diabetes tipo 2. La Universidad de Harvard también informa que la grasa visceral puede ser grasa activa y puede liberar hormonas que afectarán tu salud, como leptina, que afecta tu apetito, y adiponectina, que afecta tu sensibilidad a la insulina.

Dieta

Uno de los principales culpables de la grasa en el estómago y el vientre es tu dieta. Comer comidas y tentempié que son alimentos procesados, contienen azúcar, harina blanca, grasas saturadas y grasas trans harán que ganes grasas; y si eres propenso a ganar grasa en el vientre, allí es donde terminará. Cambiar el tipo de alimentos que consumes para incluir comidas más saludables y nutritivas te beneficiará en gran medida, a ti y a tu salud. Los granos integrales, las frutas, los vegetales, las grasas mono y poliinsaturadas y las proteínas magras te ayudarán a reducir la cantidad de grasa que tienes en el estómago.

Ejercicio

El ejercicio cardiovascular no sólo fortalece tu corazón, sino que además te ayuda a quemar grasas y calorías, y es un arma efectiva contra la grasa en la barriga. La Universidad de Harvard recomienda al menos 30 minutos diarios de actividad física que requiere un esfuerzo de energía, pero los investigadores sostienen que hacer 60 minutos por día de ejercicio sería incluso mejor. La Universidad de Harvard también informa que correr parece ser particularmente útil para quemar y evitar la grasa visceral. Incorporar un plan de trote o carrera en tu programa de entrenamiento una o tres veces por semana tendrá resultados favorables.

Entrenamiento de fuerza

Levantar peso o participar en una actividad como el yoga, que ayuda a formar masa muscular magra en todo el cuerpo, también combate la grasa visceral. La masa muscular magra ayudar a estimular tu metabolismo y la cantidad de calorías que quemas por día. Para maximizar la quema de calorías, opta por programas que fortalecen todos los grupos musculares del cuerpo, en vez de sólo los músculos abdominales y centrales.