El tipo de aborto que tu doctor escoja para ti dependerá de la etapa de embarazo en la que estés. Por lo general, los abortos que se realizan al principio del embarazo tienen un período de recuperación más corto por ser menos extensivos. Si el aborto se efectúa durante la etapa tardía, el tiempo de recuperación será más largo. Es importante que discutas los distintos tipos de abortos y los cuidados posteriores para el procedimiento que hayas elegido para que puedas saber con exactitud cómo el aborto afectará a tu cuerpo, además de entender lo que ello implica a medida que retomes tus actividades regulares, como el ejercicio.

Recomendaciones del médico

El médico que realice el aborto estará familiarizado con tu caso individual, el tipo de aborto al que debas someterte y lo que ello significará para tu recuperación. Luego del procedimiento, discute acerca de cómo regresar a tus actividades regulares. En caso de que hubiera complicaciones, puede que el período de recuperación tras el aborto sea más extenso de lo normal. Si olvidaste pregunta, puedes llamar a la clínica y hablar con una enfermera que consiga tu archivo y te proporcione recomendaciones personales con la ayuda de un médico.

Inmediatamente después

Quizás te sientas algo aturdida inmediatamente después del procedimiento, según el tipo de anestesia que haya usado tu doctor. Si bien lo más probable es que no tengas inconvenientes para caminar, tal vez sea mejor que le pidas a un amigo o familiar que te lleve de regreso a casa desde la clínica para que puedas descansar y recuperarte. Está bien que retomes tus actividades diarias generales como limpiar la casa, caminar o ir al trabajo o a la escuela en los próximos días luego del procedimiento. Los únicos efectos duraderos pueden ser los flujos y los calambres.

Luego de una semana

Luego de una semana o 10 días puedes comenzar a retomar tu rutina de ejercicios normal, siempre y cuando te sientas cómoda. Si comienzas a ejercitarte y observas un sangrado excesivo, entonces suspende el ejercicio y contacta a tu médico de inmediato. De ser posible, facilita la rutina de ejercicios para que tu cuerpo se adapte nuevamente al ejercicio y para que tengas tiempo de evaluar sus reacciones. Mantente atenta a los signos que adviertan un problema, por ejemplo, un sangrado intenso, coágulos de sangre, fiebre superior a los 100 grados Fahrenheit (37,7 grados Celsius) o dolor severo.

Ejercicios de bajo impacto

Lo mejor para retomar la actividad física son los ejercicios de bajo impacto. Esto quiere decir practicar ejercicios que son más fáciles de hacer para que tu cuerpo se vaya acostumbrando nuevamente a la rutina. Comienza con ejercicios suaves, como las caminatas, el levantamiento de pesos livianos o el yoga. A medida que te sientas más fuerte, puedes aumentar los pesos, salir a trotar o andar en bicicleta. Es importante que te tomes tu tiempo y que escuches a tu cuerpo mientras regresas a la normalidad luego del aborto.