Mi bebé tiene las palmas de las manos y las plantas de los pies rojas

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Un niño con las palmas de las manos y plantas de los pies rojas es probable que tenga un virus leve llamado enfermedad de la mano, el pie y la boca. No es raro que la mitad de un salón de guardería tenga esta enfermedad al mismo tiempo debido a la naturaleza altamente contagiosa del virus y el cambio frecuente de pañales dentro de la instalación. Si sospechas que tu niño tiene la enfermedad, consulta con el médico de tu hijo para el diagnóstico y el tratamiento adecuado.

Identificación

La enfermedad de manos, pies y boca se inicia con una fiebre de menos de 102 grados Fahrenheit (38,8 grados celsius) que se acompañan de dolor de garganta, falta de apetito y la sensación general de malestar. Pocos días después de la fiebre, a menudo se desarrollan úlceras dolorosas en la boca , la lengua y lado de la mejilla del niño. Pequeñas ampollas o llagas pueden aparecer en la palma de las manos de tu hijo y en las plantas de los pies, así como los glúteos, brazos, muslos o los genitales. La erupción puede parecerse a la de la varicela. Las ampollas fuera de la boca no duelen y casi nunca dan comezón. El virus a menudo se produce durante el verano y el otoño y afecta con mayor frecuencia a niños pequeños.

Causa

La enfermedad de manos, pies y boca es a menudo causada por el virus Coxsackie, que se transmite por las secreciones de la garganta y la nariz de una persona infectada. El virus también se propaga por el fluido dentro de una ampolla o las heces de una persona infectada. Los niños que comparten juguetes y utensilios de comida puede transmitir el virus de persona a persona. Si un niño tose, estornuda, se ríe o habla cerca de tu hijo, es posible que inhale las secreciones y se infecte con el virus.

Tratamiento

No existe un tratamiento para la enfermedad de manos, pies y boca. Los antibióticos son ineficaces y por el momento las úlceras aparecen, un medicamento antiviral no cambia la duración del virus. Tu médico puede recetar un enjuague bucal para adormecer las úlceras de la boca y hacer que tu niño esté más cómodo. El acetaminofén o ibuprofeno alivian el dolor de las úlceras de la boca y reducen la fiebre de tu hijo. Asegúrate de que tu hijo beba abundante líquido para evitar la deshidratación.

Prevención

Dado que el virus es muy contagioso, tu hijo puede no ser capaz de evitar esta enfermedad. El lavado frecuente de las manos de todos los miembros de la familia reduce el riesgo de que tu niño adquiera infecciones virales. Lávate siempre las manos después de cambiar pañales, antes de comer y después de usar el baño. Si el fregadero no está disponible, haz que tu familia use un desinfectante de manos para reducir al mínimo los gérmenes. Evita exponer a tu hijo a las personas que parezcan enfermas. Mantén a tu hijo en casa si tiene la enfermedad de manos, pies y boca.