Los peligros de las nueces de Brasil

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brazil nuts. nuts image by L. Shat from Fotolia.com

Conocidas por su rico sabor, las nueces de Brasil se han convertido en un aperitivo popular alrededor del mundo, considerándose como un placer pecaminoso entre muchos amantes de las nueces. Sin embargo, las nueces de Brasil pueden poseer ciertos peligros ocultos y los problemas van mucho más allá de su cuestionable valor nutricional.

Identificación

Nativos de Sudamérica, los árboles de nueces brasileñas pertenecen a la familia de Lecythidaceae y crecen predominantemente en Bolivia, Brasil, Colombia, Perú y Venezuela. En promedio, los árboles alcanzan entre 100 y 150 pies (30 y 45 metros) de alto y tienen troncos con diámetros entre los 3 y 6 pies (90 y 180 cm). Los frutos del árbol crecen en racimos y cada fruto es una cápsula dura con apariencia de madera que no es más grande que una toronja. Estas semillas se conocen comúnmente como nueces de Brasil.

Características

Cuando el cascarón del fruto se abre, en su interior se encuentran entre 8 y 12 semillas o nueces en forma de gajos. El cascarón exterior de la nuez de Brasil es duro, café y con una forma parecida a un dedo del pie. Cada cascarón contiene una nuez blanca y carnosa.

Beneficios

Además de ser altas en proteínas, calcio, magnesio, tiamina y zinc, las nueces de Brasil son probablemente la mejor fuente natural de selenio, conteniendo más de 1000 por ciento de los montos recomendados para la dieta en Estados Unidos. El selenio ha probado combatir el cáncer, enfermedades cardíacas e incluso el envejecimiento.

Advertencias

Las nueces de Brasil presentan algunos peligros potenciales. Nutricionalmente, la nuez de Brasil es 18 por ciento proteína, 13 por ciento carbohidratos y 69 por ciento grasa, con 25 por ciento de esa grasa dentro de las grasas saturadas. Eso sobrepasa a la nuez de macadamia en términos de contenido de grasa.

Los cascarones de la nuez de Brasil contienen altas cantidades de aflatoxinas, una sustancia tóxica natural que puede causar cáncer de hígado.

Incluso el alto contenido de selenio de las nueces puede ser demasiado, llevando a una posible toxicidad. Demasiado selenio puede causar que las uñas y el cabello se vuelvan frágiles y se caigan.

También está el peligro de las reacciones alérgicas. Las alergias a las nueces tienden a ser las más serias de las alergias, llevando a consecuencias que pueden poner en peligro la vida.

Pero probablemente el riesgo más bizarro asociado a las Nueces de Brasil es la radiación. Los árboles son tan grandes que su sistema de raíces se entierra profundamente en el suelo y absorbe cantidades inusuales de radio de la tierra. El radio se transfiere a las nueces, volviéndolas radioactivas. Se cree que las nueces de Brasil tienen 1000 veces más radio que el siguiente alimento más radioactivo. Aunque aún hay muchos estudios por concluir sobre las nueces de Brasil, la cantidad de radiación en una nuez de Vrasil es pequeña comparada con la radiación que encontramos en el día a día y no se cree que genere ningún problema serio de salud sin importar la cantidad que se ingiera.

Conceptos erróneos

El nombre de la nuez de Brasil apenas es preciso. El mayor exportador de las nueces de Brasil es en realidad Bolivia, no Brasil. Y la nuez de Brasil no es una nuez, sino una semilla.