Enfermedades en las patas de los gatos
Escrito por Sarah Metzker Erdemir ; July 18, 2017En algún momento, es probable que los dueños de gatos vean algún tipo de irritación o dolor en las patas de su mascota. Por lo general, la inflamación en la pata de un gato es causada por algo benigno como una infección o una lesión. Pero a veces, las patas irritadas, con dolor o sangre son un indicio de una enfermedad más grave. Si un gato tiene molestias con sus patas durante más de uno o dos días, llévalo al veterinario para su diagnóstico y tratamiento.
Síntomas
Los gatos con lesiones o enfermedades en los pies por lo general tienen síntomas obvios. Un gato se lamerá o morderá constantemente una pata irritada, a veces hasta el punto de causar sangrado. A menudo, el gato cojea o de otro modo intenta favorecer la pata afectada. Si las examinas y ves que están hinchadas y rosadas, con sangre, o mojadas por lamerlas en exceso, debes visitar al veterinario. Las lesiones, golpes, o pústulas son también motivo de preocupación.
Infecciones
Los gatos son animales activos y curiosos e incluso los que viven en casa pueden llegar a lesionarse sus patas mientras juegan y exploran. Estos felinos también pueden lastimárselas en peleas con otros animales, y son propensos a las picaduras de insectos, debido a su tendencia a perseguir abejas o escorpiones. Cualquier herida abierta, objeto incrustado o picadura de insecto en la pata de un gato es propenso a las infecciones, sobre todo si este utiliza una caja de arena. Por otra parte, algunos de ellos tienen reacciones alérgicas bastante fuertes a las picaduras de abejas y mosquitos. Consulta con tu veterinario sobre cómo mantener limpia una pata herida y si tu gato necesita antibióticos o antihistamínicos.
Pénfigo
El pénfigo es un trastorno del sistema inmunológico, que es común en los gatos. A los gatos con esta enfermedad le aparecen protuberancias en las patas y la cara. Estas se convierten en pústulas, y luego en costras. Las almohadillas de las patas también se pueden hinchar y partir. La única manera de diagnosticar pénfigo es con una biopsia de piel. Esta enfermedad se confunde a menudo con el lupus felino, por lo que es importante que la biopsia sea examinada por un patólogo experimentado. El pénfigo es tratado con supresores del sistema inmune, como los corticosteroides y el propietario puede tener que poner en remojo y limpiar los patas de su gato hasta que las úlceras sanen.
Pata de almohada
El nombre médico para la pata de almohada es pododermatitis de células plasmáticas. Esta enfermedad se caracteriza por almohadillas de color rosa o púrpura e inflamación severa, y la almohadilla se siente muy suave cuando se presiona. Esta dolencia generalmente afecta a más de una pata. A menudo, el gato no parece especialmente preocupado por esta situación, y a veces sólo puede diagnosticarse con una biopsia o análisis de sangre. Las causas de esta afección no se comprenden bien, pero puede ser tratada con éxito con esteroides y/o antibióticos.
Granuloma eosinofílico
Con síntomas similares a la pata de almohada, el granuloma eosinofílico por lo general sólo afecta a una pata y generalmente es causada por alergias. El alérgeno puede estar en el aire, medio ambiente, o los alimentos. Si el cuerpo del gato tiene una reacción extrema a esta alergia, el sistema inmune ataca el colágeno en su pata, causando la inflamación. El granuloma eosinófilo puede ser tratado con esteroides, antibióticos o anti inflamatorios, y el veterinario le realizará pruebas para determinar el origen de la alergia.
Más artículos
Referencias