Ejercicios para endurecer los puños

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Jupiterimages/Polka Dot/Getty Images

Los practicantes de las artes marciales tradicionales realizaban ejercicios destinados a endurecer sus puños y convertirlos en armas más impresionantes. Si bien estos ejercicios no son muy comunes y más que inapropiados en el mundo actual, es bueno conocer de ellos únicamente en un contexto histórico. Vale la pena tener un puño duro, pero valen más hoy unas manos que sepan escribir o manejar un teclado. Muchos de dichos ejercicios se basaban en tanto abuso hacia la mano que ésta quedaba inflexible e insensible.

Sacos para golpear

Golpear repetidamente un saco sin guantes o paños ayuda a tu condición en soltar golpes. Si bien esta actividad endurece físicamente tu puño, su principal ventaja es que mejora tu técnica al golpear, haciendo tu mano más fuerte para que desprenda los golpes con su parte más dura. En términos de dureza, golpear un saco hará que te salgan callos en la superficie donde lo golpees.

Tabla makiwara

Una tabla makiwara consiste en un bulto de cuerdas que algunas veces viene con algún relleno debajo de la cuerdas, colocado en la parte superior de una tabla de madera. Los artistas marciales golpean la makiwara colocando la mano en diferentes posiciones, logrando cierta condición con cada golpe dirigido a esa superficie tan dura. Aparte de producir callos en los dedos, realizar esta actividad muchas veces causará pequeños desgarros en los músculos y fracturas en los huesos; los músculos y huesos sanarán volviéndose más gruesos y fuertes, de la misma forma en que una cicatriz es más fuerte que la piel alrededor de ella. Sin embargo, justo igual que las cicatrices, el área en cuestión será menos flexible e insensible.

Cenizas y piedra

Los artistas marciales solían acostumbrar sus manos al dolor al meterlas en tazones con pequeños guijarros o cenizas calientes. Esto impulsaba su tolerancia hacia el dolor, cubriendo la mano entera con callos gruesos y dañando los nervios; de esta forma reducían la sensibilidad en la mano. Si bien estas actividades convierten de manera eficaz las manos de una persona en instrumentos fuertes pero burdos, son aún más eficaces en inutilizar las manos para tareas que requieran un trato delicado.

Aceites de hierro

Puedes encontrar estos aceites o linimentos en la mayoría de los catálogos de la mayoría de las artes marciales. Los linimentos utilizan hierbas que mejoran la circulación en la mano mientras ejercitas la piel externa. Si bien no se considera un ejercicio, estos aceites pueden ayudar a endurecer tus manos. Ofrecen varias de las ventajas en las técnicas de endurecer los puños a la par de evitar muchos de los problemas.