¿Se pueden lavar las zapatillas deportivas Nike de piel?

Los zapatos de piel se ensucirán cada vez que los uses fuera.

Creatas/Creatas/Getty Images

Los zapatos de piel respiran naturalmente, son flexibles y tienen una larga vida, por lo que marcas como Nike utilizan pieles en la mayoría de sus líneas de calzado. Los zapatos Nike de piel están diseñados para los deportes y otros ejercicios, por lo que mostrarán signos de desgaste así como de suciedad y manchas.

Es posible lavar los zapatos de piel, pero se debe hacer correctamente, de lo contrario podrías dañarlos o destruirlos.

Daño por lavadora

Los zapatos de piel nunca deben ser lavados en una lavadora. Incluso en un ciclo suave, el movimiento giratorio e intenso del agua puede corroer la piel. Sumergir el zapato en el agua no es recomendable ya que el agua puede absorberse a través del zapato y provocar daño a la piel. Al piel necesita secarse de forma natural y, cuando hay exceso de agua dentro, la piel no se seca completamente, causando que la piel adquiera moho. Los zapatos de piel nunca deben colocarse en la secadora, ya que podría romper la piel por la sequedad rápida. La única vez que es aceptable lavar las zapatillas Nike de piel en una lavadora es si la etiqueta indica específicamente que puedes hacerlo.

Cuidado general

Para mayor duración, almacena los zapatos de piel Nike en una horma de cedro, que absorberá el exceso de humedad. Deja que los zapatos se sequen entre cada uso, por lo menos ocho horas. Mantén los zapatos lejos del calor en todo momento. No estires ni doble los zapatos en formas anormales y ten cuidado al colocar el pie en el zapato, nunca debes forzar el pie. Elimina la suciedad cuanto antes para evitar que se filtre en la piel.

Lavado a mano

Quita los cordones, lávalos en la lavadora con otras prendas o enjuaga en un pequeño recipiente con agua jabonosa y cuelga para secar. Combina 1/2 cucharadita de líquido suave para trastes con 1/2 taza de agua a temperatura ambiente. Usa un cepillo de cerdas suaves o un cepillo de dientes limpio para limpiar los zapatos. Coloca el cepillo en el agua jabonosa y frota el zapato en un movimiento circular. Usa una toalla suave y seca para limpiar la solución en el zapato. Repite este proceso hasta que hayas cepillado el zapato entero. Sumerge un paño suave en agua y limpia la superficie del zapato.

Secado y pulido

Coloca los zapatos limpios en una horma o rellena con toallas de papel, lo que ayudará a mantener la forma, mientras que los zapatos se están secando y absorben el exceso de humedad. Mantén en lugar seco y bien ventilado o en el exterior, pero lejos de la luz solar directa o la lluvia. Utiliza un pulidor para calzado de piel comercial para darle brillo y proteger la piel, si lo deseas. Lee las instrucciones en el producto y úsalo en consecuencia.

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