Cómo hacer extracto de semillas de pomelo

El extracto de semillas de pomelo es un remedio natural muy popular utilizado para muchas enfermedades, incluidas algunas dérmicas, como el eccema o la psoriasis. Este extracto, por lo general, se fabrica para ser comercializado. El proceso de elaboración del extracto de semillas de pomelo es bastante difícil. En él intervienen una serie de sustancias químicas y tratamientos de calor para aislar de forma segura el extracto para su uso doméstico. Preparar las semillas para la extracción requiere de algunas sustancias químicas fuertes. El proceso debería realizarse en un laboratorio seguro y por un químico experto; no debería hacerse en casa. El siguiente artículo explica los pasos necesarios para obtener el extracto de semillas de pomelo a nivel industrial.

Muele las semillas de pomelo hasta conseguir un polvo fino.

El polvo se disuelve en agua pura para eliminar la mayor parte de la semilla, que incluye la fibra y la pectina.

Esta mezcla se somete a un proceso de secado por atomización a baja temperatura para conseguir un polvo concentrado de semillas de pomelo.

Este polvo concentrado se disuelve luego en glicerina vegetal y se calienta. La glicerina vegetal está compuesta de aceites naturales de plantas que han sido tratadas para convertir sus grasas en glicerina.

Agrega a la mezcla sustancias ácidas naturales. Puede ser ácido ascórbico u otros ácidos de uso alimentario.

En este momento debes calentar la mezcla bajo presión para catalizarla.

Enfría la mezcla.

Ahora debes filtrar la mezcla.

Debes tratar el producto resultante con luz ultravioleta que, al actuar sobre las enzimas, retrasa su descomposición.