Cómo deshacerte de la candidiasis de pezones

Cuando amamantar a tu bebé te causa dolor, es posible que tengas una infección. Sigue estos pasos para acabar con el malestar.

Determina si tienes la candidiasis de pezones. Puedes sentir dolor y sensibilidad extrema durante la lactancia cuando algo entra en contacto con tus pezones, o puede manifestarse como dolores punzantes profundos en el pecho. Los pezones pueden estar agrietados, adoloridos, con descamación o ampollas. Todos estos son signos de este trastorno.

Comprueba si tu bebé tiene aftas. Puedes ver protuberancias blancas que no desaparecen como la leche en su boca. La candidiasis también puede hacer que tu bebé tenga dermatitis del pañal.

Consulta a tu médico para obtener medicamentos que puedan ayudarte a aliviar la infección.

Compra un poco de violeta de genciana en una farmacia. Cubre tus pezones con el líquido púrpura dos veces al día. No tienes que lavarte antes de amamantar a tu bebé. La violeta de genciana se desprenderá, pero le ayudará a aclarar la candidiasis en su boca.

Lava todos tus sostenes en agua caliente con lejía. La candidiasis de pezones puede vivir a través del lavado tradicional. Lava todos los juguetes de tu bebé y todo lo que entra en contacto con su boca. Tendrás que hervir todos los chupetes o tetinas de los biberones.

Usa una mezcla de 1 cucharada de vinagre y 1 taza de agua para lavar tus pezones después de cada sesión de lactancia para ayudar con el dolor. Usa un hisopo fresco para aplicar la solución cada vez.

Continúa con estos pasos durante 2 semanas después que la infección haya empezado a desaparecer. Es difícil deshacerte de la candidiasis de pezones y puede reaparecer si terminas el tratamiento demasiado rápido.