En 2011 TotalDUI.com realizó una encuesta a 1.000 adolescentes, esta indicó que el 50% de los adolescentes entra a un sitio de red social por lo menos una vez cada día y que la mayoría de los estudiantes no puede permanecer lejos de ellas más de 34 horas. Aunque navegar con seguridad por Facebook durante unos minutos diariamente no tenga nada de malo, obsesionarse con las redes sociales o pasar varias horas y todos lo días conectado puede tener un efecto negativo en tu hijo.

Prohíbele a tu hijo tener su propia cuenta de Facebook hasta que tenga por lo menos 13 años de edad. Los usuarios de esta red social necesitan comprobar que tienen 13 años o más antes de abrir una cuenta, pero en una encuesta hecha por Consumer Reports se descubrió que había 7,5 millones niños menores de esa edad en el sitio, una tercera parte de los usuarios menores en total.

Crea una agenda equilibrada que le ofrezca a tu hijo diferentes actividades para un estilo de vida completo. Si está ocupado con la escuela, actividades extracurriculares y obligaciones familiares, tu hijo tendrá menos tiempo para pasar en Facebook. Evita saturar la agenda de tu hijo, elige algunas actividades para hacer juntos cada semana y dale tiempo libre para que su horario esté completo.

Limita la cantidad de tiempo que pasa tu hijo en la computadora diariamente y manténla en un área accesible de tu hogar. Es menos probable que tu hijo pase todo el día en Facebook si tiene 30 minutos como límite para usar la computadora en actividades no escolares o sabe que alguien puede pasar por ahí y ver lo que está haciendo en línea.

Configura los controles parentales en tu computadora para que tu hijo no pueda entrar a Facebook, o, si tiene una cuenta, sólo tenga acceso al sitio por cierta cantidad de tiempo cada día. Los complementos y el software del navegador de internet pueden permitirte controlar el tiempo que tu hijo pasa en Facebook o bloquear el acceso al sitio completamente.

Habla con tu hijo sobre los límites con las redes sociales y tus preocupaciones con Facebook. Según un reporte de Common Sense Media en 2012, del 90% de adolescentes que ha usado una red social de algún modo, el 20% dijo ser adicto a ellas, mientras que el 43% desearía poder desconectarse más frecuentemente. Tal como cualquier otra actividad, las redes sociales pueden ser peligrosas si se usan obsesivamente y en sustitución de actividades sociales reales. Ayuda a tu hijo a comprender que usar Facebook está bien, siempre y cuando lo haga con responsabilidad y esté dentro de límites razonables. Eso puede ayudarle a ser más comprensivo y obediente con las reglas y los límites que impones en el uso de Facebook.